Michel Deguy — Convicción
Llamemos autismo al resultado. La “escena” mundial puede ser caricaturizada así: es el motín de las necesidades vitales saqueando el convoy de ayuda caído del cielo. Sálvese quien pueda de las autodefensas «legítimas», o la excepción absoluta de mi existencia – además idolatrada como “valor absoluto” por toda axiología, y perfumada con justificación «carl-schmittiana» vulgarizada («la excepción hace la ley») – disloca toda la esfera del derecho y la justicia.